Romería de Tomelloso

Este fin de semana se ha celebrado en Tomelloso su romería en honor a la Virgen de las Viñas y vaya romería. De interés turístico nacional.
Tiene de todo, mucha actividad y mucha gente.
La gente estos días sube al Santuario de Pinilla a unos 4 o 5 kilómetros, tienen costumbre de hacer carrozas de temas cotidianos y carrozas verdes, que son remolques totalmente cubiertos de ramas.
El pregón fue el viernes, nombramiento del mayoral y actuaciones con traca.
El sábado hay concursos deportivos, de tractores, comidas, reatas con carros y mulas, traspaso a hombros de la Virgen y una procesión de antorchas por la noche por el camino del Santuario.
También hubo una corrida de toros benéfica para Cáritas y reparto de hornazos para los asistentes.
Yo solo fui el domingo y vi de todo. Primero subimos al Santuario, al ofrecimiento de los niños no llegamos a tiempo, pero si estaba la virgen fuera de la ermita y le estaban dando una misa, había muuucha gente, también un coro cantando, recorrimos todo el santuario, gente acampada, con sus pérgolas y su lumbre, el grupo de jóvenes y la música discotequera a tope, exposición fotográfica de todos los años anteriores, un montón de chiringuitos, atracciones, puestecillos de todo tipo, ropa, golosinas, bolsos, un velatorio, tienda de productos de la virgen, también llegaron las reatas, un montón de mulas engalanadas que daban mucho color.
Allí estaban las carrozas de las que hablaba antes y gente, mucha mucha gente por todos sitios, no paraban de llegar autobuses.
El tiempo amenazaba lluvia todo el rato, de vez en cuando chispeaba y a mediodía cayó una buena, aunque yo ya estaba resguardada y no me pilló.
Es típico también comer caldereta, así que nos ceñimos a la tradición, tomamos café y copa en unos bares del pueblo y nos fuimos a ver la procesión, la procesión es original, a las 5 sale de Pinilla llueva o no llueva y en el pueblo se reune con el resto de la gente, grupos folclóricos, la banda de música.
En el recorrido tocaba la banda, seguían a la virgen los fieles, una virgen cubierta de plástico por el tiempo, las reatas de mulas engalanadas, todas las carrozas, casas, barcos, las carrozas verdes llenas de jóvenes, caballos.
Y termina con bailes de manchegas, que no se si se pudieron realizar por la fuerte tormenta y granizada.
Merienda y para casa.
Y seguro que me dejo algo, ya que es la primera vez que voy y tampoco estoy muy puesta, lo que me iban contando.
Me lo pasé bien.
Dejo una selección entre las mil fotos que hice.
Y quiero destacar que me gustó mucho, la cantidad de gente que iba con el atuendo típico manchego, el blusón, trajes de manchegas, el pañuelo de hierbas, boinas o gorras...

También paramos a ver un bombo.
Un bombo es una construcción rural típica de allí, estaban hechos para alojar a los pastores y gente del campo, junto con los animales y los aperos.
Es de forma circular de lajas sin utilizar argamasa, con cocina, chimenea, camas de piedra y pesebre.

Os animo a que otro año os paséis por allí. Totalmente recomendable.